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    Jose Ramon Vindel Ruas
      Definición de objetivos. 
      En  esta fase, y conforme a la información obtenida deberemos tomar decisiones que  afectarán al futuro de nuestra empresa. Los objetivos deben quedar reflejados  de forma tal que permitan la medición de resultados. Así mismo los objetivos deben  ser: 
      
        
          - Adecuados: deben coincidir con las ideas  generales de la empresa.
 
          - Medibles: en el sentido de determinación de lo  que se quiere alcanzar y cuándo.
 
          - Alcanzables.
 
          - Concensuados: es decir, aceptados por los demás  miembros de la organización.
 
          - Flexibles: podrán modificarse en caso de cambios  en el mercado.
 
          - Comprensibles
 
          - Coherentes: que coincidan con los principios  establecidos por la empresa.
 
         
       
        
      Respecto  a los tipos principales de objetivos, los podemos dividir en tres: 
      
        
          - Objetivos de ventas: son de extrema importancia  para el futuro de la empresa puesto que representan el tamaño máximo al que  puede llegar una empresa dependiendo del sector en que se encuentre  posicionada. Para su elaboración se busca principalmente información  cuantitativa.
 
          - Objetivos de posicionamiento: con ellos la  empresa puede diferenciar claramente su producto en la mente del consumidor.  Las decisiones sobre este objetivo permiten además tener más claro los  productos o servicios a desarrollar, cómo mejorar la comunicación, la atmósfera  a instaurar en la empresa y cómo hay que tratar a nuestro cliente. Normalmente  nuestro producto será similar al de la competencia, y las únicas diferencias  radicarán en nuestro posicionamiento como empresa en el mercado. Con un  correcto posicionamiento, el cliente nos percibirá por los factores  diferenciales que podemos ofrecerle. Sin embargo, la falta de objetivos de  posicionamiento no impedirá el que el cliente genere una idea sobre nuestra  empresa, idea que muchas veces no se corresponderá con la que la compañía desea  transmitir. 
 
          - Objetivos de rentabilidad: se busca la  rentabilidad tanto económica como social. Para tomar decisiones sobre estos  objetivos es necesario conocer el beneficio elaborando el correspondiente  presupuesto. Es importante resaltar que estos objetivos deberían valorarse no  sólo desde el punto de vista cuantitativo sino también desde el cualitativo.
 
         
       
Jose Ramon Vindel Ruas      
    
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